Creo que nunca hemos compartido tanto tiempo con una pareja antes, ni después de su evento, y con Edwin y Marisol fue la excepción. Tuvimos el placer de conocernos antes de su boda en una sesión de foto en el parque central (Central Park). Compartimos una rica comida mexicana que Marisol ni lenta, ni perezosa tuvo la valentía de acompañarnos con una salsa verde que te pone rojo de lo picante. Nos acompañaron en el cumpleaños de Natalia y después tuvieron la amabilidad de traernos unos recuerdo de la boda y bandeja paisa.
El dia de la boda fue un mar de felicidad, sentimientos encontrados que me pusieron la piel chinita. Lo mas emotivo fue cuando la mama de Marisol le aconsejaba a su hija sobre su nueva etapa. En este evento no solo se hizo ver lo que una verdadera amistad es, ya que familiares y amistad de Mariol viajaron desde Canadá para estar presente y compartir esta fecha especial. Lo mejor de todo fue como Edwin, con su gran sentido de humor no solo hizo pasar el tiempo tan rápido, si no que hizo nuestro trabajo mas fácil. Y realmente me sentí como en familia por la confianza, amabilidad de toda la gente linda de Colombia y Ecuador. Sobretodo de Marisol y Edwin por la confianza de dejarnos ser parte de un día especial, también de compartir con nosotros una rica salsa mexicana y una bandeja paisa. Gracias a esta linda pareja y deseándole lo mejor a los dos.